La cordura degollada

561

La decapitación es el acto más brutal perfeccionado por los hombres, lo que simboliza la pérdida de la razón en su sentido más exacto. Así lo expresa el narrador, crítico y ensayista Sergio González Rodríguez en su libro más reciente, El hombre sin cabeza.
El texto, publicado por editorial Anagrama en 2009, constituye una investigación que penetra en el contexto de violencia que enfrenta México. “Me parecía importante plantearlo en tres niveles: la crónica-reportaje de los hechos, el análisis ensayístico de los antecedentes culturales y políticos que hay de por medio en los usos, por ejemplo de la decapitación, y la postura personal de quien escribe, la cual se va modificando con el registro de estos casos de violencia”.
El hombre sin cabeza aborda también los fenómenos de la brujería y los sacrificios humanos vinculados a los traficantes de drogas, las nuevas expresiones intimidatorias y el miedo, el uso de los cuerpos de las víctimas con mensajes crueles de gran alcance.
En un segmento del libro el autor precisa: “El miedo es parálisis o comportamiento autocomplaciente, y los subrelatos del miedo son excrecencias y recursos que impiden o quieren impedir la ruptura de un tejido de significaciones saturado de espanto. El deterioro frente al espejo propio. Así, el miedo se vuelve un conductor y gestor del caos, cuyos signos palmarios son la desinstitucionalización (por ejemplo, las corruptelas y la indiferencia, la pérdida de credibilidad y la anarquía) y la proliferación de identidades ciudadanas y cuerpos superexplotados”.
Este relato, sin ficción, presenta el testimonio de un sicario y cortador de cabezas “asalariado” y dependiente de un cártel mexicano, y entrelaza la perspectiva del propio narrador a través de su refinada alternancia de la crónica, el ensayo y los apuntes autobiográficos, en que las figuraciones sobre la decapitación en el arte permiten desvelar las anomalías de la cultura del pánico que cubre al planeta.
Sergio González Rodríguez forma parte del Sistema Nacional de Creadores del Arte y es reconocido por su habilidad como cronista y ensayista. En 2002 obtuvo reconocimiento con el libro Huesos en el desierto, una investigación sobre el poder político, narcotráfico y asesinatos de mujeres en la frontera de México y Estados Unidos.

Artículo anteriorConvocatoria SEMS /Resultado Programa de estímulos CUAAD
Artículo siguienteEstímulos Económicos para Estudiantes Sobresalientes