Empresarios y autoridades de la ciudad jalisciense de Tepatitlán levantan la voz ante la escasez de agua, la que califican de “crítica”, pues tendría un impacto nacional al ser esta población la productora del 29 por ciento del huevo que se consume en México. Esperan apoyo del gobierno del estado para realizar la obra de un acueducto que los dote del líquido.
Ubicada a 30 minutos de la Zona Metropolitana de Guadalajara, Tepatitlán es una zona de vocación agropecuaria. De acuerdo con cifras de la Asociación de Avicultores de Jalisco, la entidad aporta el 51 por ciento del huevo producido en el país, y Tepatitlán el 29 por ciento.
Existen en los Altos de Jalisco, 25 millones de gallinas, además de 20 mil cabezas de ganado y 60 mil cerdos. Su principal presa, llamada El Jihuite, está casi vacía y azolvada, luego de que el temporal de lluvias en 2011 fue raquítico.
El problema del agua en Tepatitlán no es nuevo. La región alteña se ha caracterizado por las sequías y durante años los gobiernos recurrieron a la perforación de pozos, que hoy están fuera de servicio.
“Son 320 pozos y podrían colapsar en cualquier momento, pues han sido sobreexplotados durante años”, señala la presidenta municipal, Cecilia González Gómez, quien impulsó durante su administración la obra de un acueducto que traerá agua desde otra presa, la de El Salto, en el vecino municipio de Valle de Guadalupe. Sin embargo, apenas va en la primera etapa y tal vez tardará tres años en ser concluida, a menos que el gobierno del estado aporte recursos.
El presidente de Coparmex, delegación Tepatitlán, Alejandro Vázquez, se mostró molesto por las promesas incumplidas del gobernador Emilio González Márquez, que en varias ocasiones ha prometido dinero para el acueducto, proyecto que asciende a 475 millones de pesos.
Este acueducto tendrá una longitud de 30 kilómetros, con una línea conductora de 18 pulgadas e infraestructura complementaria, como tuberías, caminos, proyecto ejecutivo de la planta potabilizadora y tanques almacenadores, así como la distribución, sectorización, automatización y almacenamiento.
El 11 de noviembre arrancó la primera etapa, con un costo de 71 millones 433. El ganador de la licitación fue el Grupo Constructor Perse, S. A. de C. V. Para esta primera fase tampoco puso dinero el gobierno estatal, pues la mitad provino de Conagua y la otra del ayuntamiento.
“No tenemos agua y nos encontramos con que el gobierno del estado no ha etiquetado ningún recurso para el acueducto para 2012. Los empresarios, el gobierno, los ciudadanos, tenemos que apretar y empezar a presionar al gobierno del estado. ¡Aquí en Tepatitlán tenemos grandes empresas a nivel nacional, pero no hay agua!”, lamentó el empresario Alejandro Vázquez.
Vázquez recordó que hace seis años, cuando Emilio González Márquez era candidato, fue a Tepatitlán y le expusieron la carencia de agua. “De propia voz dijo que nos ayudaría. Y durante varias ocasiones ha prometido. La más reciente hace seis meses, cuando afirmó que ya estaba aprobado el recurso para dar peso por peso para el acueducto, pero ahora en enero nos encontramos con que no”.
Un estudio de 2010, realizado por la UNAM a petición de las autoridades, estima que los acuaféricos de este municipio están sobreexplotados, pues la ciudad gasta 329 litros de agua por segundo. Los 320 pozos, de entre 140 y 500 metros, trabajan 15 horas diarias y aportan el 70 por ciento del agua que Tepatitlán utiliza. La presa de El Jihuite, con 45 años de antigí¼edad, aporta el resto, pues apenas tiene capacidad para 5 millones de metros cúbicos, sin posibilidad de crecimiento. Hoy está en su nivel más bajo de la historia, abajo del 15 por ciento, según el mismo organismo de agua potable en Tepatitlán.
El 12 de enero, la presidenta Cecilia González aprovechó un acto de entrega de vehículos en Guadalajara para presentar al gobernador un informe sobre la situación actual.
“El gobernador se quedó con la boca abierta al ver que nuestra presa está seca. Le dijimos que urge su intervención. Es imperante que el gobierno del estado tome cartas en el asunto y provea recursos para enfrentar este vital reto, pero seguimos esperando un apoyo de 80 millones de pesos que ellos deberían poner para este año”, añadió la presidenta, quien considera que lo ideal será acelerar la obra y terminarla en este 2012.
González Gómez indicó que no hay intención de alarmar, pero el impacto de que Tepatitlán se quede sin agua sería nacional, “ya que aquí se produce el 33 por ciento de los alimentos básicos que se consumen en México, no solo huevo, sino res, cerdo y leche”.
Por lo pronto, la alcaldesa explicó que harán una intensa campaña de promoción para cuidar el agua durante el estiaje y esperar que las lluvias sean copiosas en 2012. A partir de febrero comenzarán a racionar el servicio de manera paulatina.
El empresario Alejandro Vázquez insistió en que seguirán tocando puertas y buscando al gobernador para persuadirlo a que apoye. “Porque sin el vital líquido no tenemos nada”.
