Hipertensión mal de muchos

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Las enfermedades coronarias o cardiovasculares ocupan el primer lugar en la lista de causas de defunción a escala mundial, de acuerdo a las estadísticas de la Organización Mundial de la Salud.
En 2004 fallecieron 59 millones de personas en el mundo. De este total más de siete millones murieron de alguna enfermedad coronaria, y otros cinco millones por ataque apopléjico u otra forma de enfermedad cerebro vascular, padecimientos relacionados con la hipertensión.
La Encuesta Nacional de Enfermedades Crónicas del año 2000, revela que a partir de 1993 la prevalencia global de la hipertensión en México era del 26 por ciento. Se incrementó 4 por ciento en tan sólo siete años. Esto significa que hay alrededor de cuatro millones más de pacientes hipertensos en el país.
Aunque estas estadísticas indican que la hipertensión arterial predomina en mayor porcentaje en la población mayor de 60 años, la doctora Yolanda Díaz Burke, investigadora del Centro Universitario de Ciencias Exactas e Ingenierías (CUCEI) señaló que los casos de esta enfermedad en jóvenes de 20 años en promedio, van en aumento.
La especialista en conjunto con un equipo del laboratorio de Bioquímica del CUCEI, emprendió un proyecto para analizar en jóvenes de 18 a 25 años, la presencia de hipertensión y su composición genética.
Explicó que entre más joven se presenten estas alteraciones, su longevidad disminuye, la calidad de vida decrece tanto a nivel físico como a nivel de aprendizaje. Su personalidad cambia.
Los resultados de la investigación arrojaron que 2 por ciento de los estudiantes del total de la muestra (536 alumnos) del CUCEI, presentaron hipertensión. Son jóvenes con obesidad y sin hábitos de ejercicio físico. Al cierre de esta edición, los estudiantes ya están siendo tratados y su padecimiento está bajo control.
Menciona además que del total de la muestra, 40 por ciento tiene problemas de obesidad, y en algunos de tipo mórbida.
Comentó que los principales factores que han propiciado el aumento de casos de hipertensión arterial son la falta de ejercicio y los malos hábitos alimenticios.
“En esta población, es una edad de cambios, si los muchachos en esta etapa no se dan cuenta de que tienen en este factor genético en conjunto con los factores ambientales, pueden tener enfermedades de adulto, como el diabetes o problemas de ataque al corazón o infarto cerebral”, agregó.

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