Gris la situación del deporte mexicano

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A poco más de 15 de meses de iniciada la administración de Carlos Hermosillo al frente de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), su gestión es calificada como gris e incluso sus días en este organismo podrían estar contados.
Será el próximo 9 de abril cuando el titular de la Conade se presente ante la Comisión de Juventud y Deporte, de la Cámara de Senadores, donde el funcionario explicará el plan nacional del deporte, el cual debió ser entregado a su llegada a la dependencia, además de rendir cuentas sobre recursos federales manejados por el Comité Olímpico Mexicano (COM).
Hermosillo será el primero de los tres dirigentes del deporte nacional en reunirse con dicha comisión, a la que después acudirán a rendir cuentas Felipe Muñoz, presidente del COM y Alonso Pérez, titular de la Confederación Deportiva Mexicana (Codeme).
Los proyectos deportivos de la actual administración revisten especial importancia, porque durante este periodo tendrán efecto los Juegos Centroamericanos y del Caribe, a celebrarse en el 2010, en Mayagí¼ez; dos Juegos Olímpicos (Beijing 2008 y Londres 2012), así como dos Juegos Panamericanos (los ya celebrados en 2007 y los que albergará Guadalajara en 2011).
Vendrán días cruciales para el deporte mexicano, cuyo modelo obsoleto necesita una reestructuración.
El docente de la licenciatura de cultura física y entrenador de triatlón, Gustavo Nuño Miramontes, explica que si hubiera que dar una calificación a la administración de Hermosillo, apenas alcanzaría el siete.
“A veces es más importante en el periodismo lo que no se dice, que lo que se dice. En esa analogía viene Hermosillo, que ha hecho lo cotidiano, lo que tenía que hacer un presidente de la Conade y aquí el problema no es lo que ha hecho, sino lo que ha dejado de hacer. Hay que recordar que es una institución joven, con todos los vicios de los viejos. Creo que su gestión ha sido entre lo blanco y lo negro”.
Indicó que es necesario replantear el modelo del deporte mexicano, pero no se ve por dónde, a causa de falta de capacidad y del equipo necesario. Además, no se sabe rodear de la gente que le pueda apoyar en esa modificación.
“Los cambios que hizo en diciembre, te dictan su línea de trabajo. Solamente es un burócrata más del deporte. Lo más importante que pudiera hacer es replantear el proyecto, pero para eso se necesitan muchas partes y esas partes son más que la gestión administrativa. Es una misión de cabildeo, de pasillo político, es decir, hay que hacer mucha labor política y él no es un hombre claro en ese aspecto: es un administrativo más, que quiere que ya termine el sexenio”.
Nuño Miramontes explicó que ante esto, lo más importante vendrá luego de los próximos Juegos Olímpicos. Se atreve a asegurar que antes de viajar al continente asiático, Hermosillo dejará su renuncia firmada.
“Ahí vendría lo más interesante: si continua o no. El problema no es ese, sino en el caso de que llegue alguien nuevo, pues hará prácticamente lo mismo, porque las partes ya están muy amarradas, el deporte mexicano está entrampado, hay muchos vicios, existe un grupo fuerte: el del olimpismo que encabeza Mario Vázquez Raña, que no dejará esto tan fácil. El problema es complejo y esto repercute en todas las estructuras del deporte”.

Los conflictos
Aunado a los problemas propios de la gestión, a esta lista de conflictos se suman la rivalidad que desde hace varios años existe entre la Codeme y la Conade. Sin embargo, este problema ha sido minimizado por Carlos Hermosillo.
“El conflicto entre estas dependencias es fuerte, pero ahora que sale Nelson Vargas de la Conade, entra Hermosillo con la consigna de no pelearse con nadie. Esto ha minimizado el problema. Básicamente le pasó la bolita al Comité Olímpico Mexicano, que es ahora el que tiene conflictos con la Conade”.
Otro de los focos rojos de su gestión fue el caso de Ana Guevara, quien dejó al descubierto los malos manejos de la Federación Mexicana de Atletismo y que se negó a participar en la próxima justa olímpica.
“Las denuncias de la velocista son un reflejo de lo que pasa en el resto de los deportes. Que no lo quieran ver, es diferente. Eso pasa a nivel nacional y estatal. El problema es que aunque sea algo cotidiano, me sigue impresionando, porque pensé que era algo superado, pero cada vez estamos peor. Si eso le pasa a Ana, con todo su historial, qué podemos esperar los demás”, expresó Nuño Miramontes.
Abundó que la actitud de Ana Guevara debe servir a la comunidad universitaria, por ilustrativa y debería ser rescatada por cada entrenador que quiera hacer algo diferente.
“Hay muchas lecturas y una es que le faltó más politización y desarrollar un trabajo conjunto con muchas partes. Fue de un día para otro la decisión y no había nada planeado, pero el ejemplo es muy valioso”.
Su relación con ciertos medios de comunicación fue un pasaje oscuro de la gestión de Hermosillo.
“Lo exoneraron, pero trae un arrastre de crisis y de conflictos. Lo que más le puede hacer ruido es que nos vaya mal en Juegos Olímpicos. El caso de Ana Guevara le pudo haber hecho mucho ruido, pero hablaron con las televisoras y callaron el asunto. No le dieron voz a Ana. Tiene un buen grupo que lo está protegiendo y ese grupo es el más fuerte del deporte en México, que es el del futbol”.
La transparencia es otro de los lados flacos, no sólo de la Conade, sino en general de muchas instituciones públicas, ya que a pesar de los avances tecnológicos, es muy pobre la información que brindan.
“Me parece que la Conade está muy pobre, ya que desde todos los medios pueden transmitir transparencia, democracia, valores, pero entras a algunas páginas y ves la información del periodo pasado. No hablemos del fenómeno de la transparencia de a quién le dan dinero y por qué, de los informes económicos, cuáles son los logros… No están actualizadas las páginas y eso es patético. Como no se hace el análisis, esto a la gente le pasa inadvertido”.

El futuro
A unos meses de que inicie la justa olímpica, ya es analizado la instauración de un premio para los medallistas mexicanos, mismo que consistiría en cinco millones para el ganador de oro, cuatro para el de plata y tres para el de bronce, cifras históricas que están por ser confirmadas. Esto sería uno de los aciertos de la gestión de Carlos Hermosillo.
“El premio es bueno, va a estimular a muchos atletas, pero si todo fuera por dinero, tendríamos a los mejores deportistas. Lo que pasa es que siempre al final de cuentas hacen lo que pueden. Creo que todo lo que venga desde el punto de vista económico, en especie, en dinero, estatus, reconocimiento por parte de las autoridades para estimular a los atletas, es bueno. Me parece que es un acierto y se trata de paliar la crisis que se avecina. Ojalá que tengamos más de alguna medalla”.
Nuño Miramontes puntualizó que Carlos Hermosillo es un hombre de buenas intenciones, pero políticamente mal ubicado en cuanto a relaciones públicas.
“Está bien protegido y bien con los que tiene que estar bien. Ahora lo van a dejar que vaya a Beijing 2008 y después vendrá el verdadero replanteamiento del quehacer para Guadalajara 2011, ya que abocarán sus fuerzas en ese evento, que es estratégico para la familia política y el aparato ideológico del estado”.

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