Francisco Javier Díaz Aguirre

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El nuevo secretario general del Sindicato íšnico de Trabajadores de la Universidad de Guadalajara (SUTUDG), Francisco Javier Díaz Aguirre, elegido recientemente por la mayoría de la base de trabajadores administrativos de la máxima casa de estudios de Jalisco, y quien representará a los 6 mil 323 sindicalizados (2 mil 874 hombres y
3 mil 443 mujeres), expuso a La Gaceta sus prioridades de trabajo.

¿Cuáles serán sua prioridades?
Mi periodo de campaña me ayudó a sentir el pulso de las necesidades de los trabajadores administrativos, tal vez no sea justo al mencionarlas por prioridad, pero hay que decir que la mayoría de los trabajadores administrativos son mujeres y, en ese sentido, vivimos en una sociedad desigual en materia equidad de género, por lo tanto desarrollaremos programas en apoyo a la mujer.
En el espacio laboral es donde se notan las diferencias de género, la mujer además de ser trabajadora cumple con el trabajo de ser madre, por lo que revisaremos la carga laboral de las compañeras madres de familia y analizaremos la posibilidad de darles prestaciones especiales.
El signo distintivo de la función sindical es el respeto por la base trabajadora, por eso deberá ser la Asamblea General quien sancione las acciones de mi gestión. Mi plan de trabajo para los próximos tres años no se va a realizar en petit comité, sino con la participación de los trabajadores.
Por otra parte, la transparencia y rendición de cuentas será una constante en esta gestión, primero quiero dejar en claro que la Asamblea General es el máximo órgano de gobierno sindical, a quien se le solicitará su visto bueno para iniciar una auditoria anual al ejercicio fiscal de las cuotas sindicales, comenzando por el ejercicio que concluye, a través de un despacho externo, porque las cuotas son de los trabajadores y deben tener la garantía de su buen uso. Con esto, nosotros nos comprometemos a que las cuotas serán debidamente utilizadas. Además, no puede haber azadón de palo en casa de herrero. En la UdeG nos dedicamos a la educación y ¿qué es la educación?, un bien muy importante para el ser humano, y son los trabajadores administrativos quienes aportan mucho para que la Universidad cumpla con su función primordial.
Por eso debemos tener acceso a la educación superior. Los trabajadores podrán iniciar o retomar sus estudios en la UdeG y la institución podrá aprovechar esos conocimientos, ya que los compañeros mejor capacitados le van a dar un plus a la Universidad.

¿En qué consiste este apoyo?
Aquí tenemos que revisar que la cantidad de plazas laborales son insuficientes en primer orden y que hasta la fecha no se cubren las necesidades de personal, pero también que dependemos de un presupuesto de operación tanto federal como estatal.
Es por eso que la UdeG genera contratos con recursos propios, pero éstos no proporcionan a los trabajadores la garantía de la estabilidad laboral, lo cual deriva un tema al que hay que ponerle más atención
En segundo orden, distinto sería si la designación de contratos tuviera que ver con la formación del trabajador, se daría acceso a quien pudiera tener mayores responsabilidades y entonces así el sindicato podría apoyar en un programa de reconfiguración del sistema administrativo. Serviría para la profesionalización de los trabajadores administrativos, para que lo que hagan por la UdeG se haga de mejor manera.

¿Sería algo así como el Servicio Civil de Carrera?
La UdeG ha hecho intentos en dos momentos, pero se necesita revisar los sistemas, los procesos y procedimientos que operan en la institución para identificar las competencias del personal, luego se les tendría que dar capacitación o formación a los trabajadores para propiciar su desarrollo. Todos sabemos que las oportunidades del Escalafón están muy limitadas, entonces no es que falte voluntad, sino que el problema es la restricción en el presupuesto universitario.

¿Entonces se suma a la demanda de mayor presupuesto para la UdeG?
Me sumo a la demanda. La mayoría de la población tenemos como única opción para acceder a educación superior a la UdeG. No todos tienen los recursos para pagar una educación privada. A quienes tenemos hijos, también nos interesa que se modifique la tendencia gubernamental de negar recursos a la educación pública. Es inaudito que esto esté pasando en México, porque como parte de la ONU y miembro de la UNESCO, el país firmó los acuerdos de la Conferencia Mundial sobre Educación Superior donde se establece que la educación es un bien público y por ello se le deben canalizar recursos del Estado.

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