A pesar de los serios problemas de salud provocados por la obesidad y de las diversas campañas promovidas por las autoridades para que la población adopte un estilo de vida saludable, la comunidad pone muchos pretextos para no hacerlo: el principal, la falta de tiempo.
Esta situación ha sido objeto de estudio por parte del egresado de la licenciatura en cultura física y deportes, Gabriel Flores Allende, quien realizó la tesis doctoral titulada “Actividad físico-deportiva del alumnado de la Universidad de Guadalajara. Correlatos biológicos y cognitivos asociados”.
En el trabajo del doctorado en ciencias de la actividad física y el deporte, consta que diversos factores podrían favorecer o dificultar la participación de los estudiantes, con lo que se podría dar el primer paso para diseñar adecuados y eficaces programas que fomenten el inicio, continuidad y reanudación en dicha práctica.
“El comportamiento del alumnado en su relación con las actividades físicas de tiempo libre es variado. Las tasas más elevadas corresponden al grupo que realiza prácticas, seguido por un considerable grupo, que habiendo sido activo, ha tenido que abandonarlas, y con bajos niveles en aquellas que nunca han llegado a ser activos”.
Explicó que de acuerdo con los sujetos de estudio, un considerable grupo de los activos es irregular en su participación en actividades físicas y deportivas. Destacó las motivaciones extrínsecas, en contraste con quienes exhiben motivaciones intrínsecas. “Esto significa que un reducido sector realiza práctica mantenida por seis o más meses. En lo que respecta a quienes han abandonado sus prácticas, las motivaciones intrínsecas y extrínsecas serían similares. En cambio, las barreras extrínsecas, como la falta de tiempo, serían las que han obstaculizado en mayor medida la adherencia entre quienes nunca han realizado práctica de tiempo libre”.
Considera que los grandes eventos deportivos, como los Juegos Olímpicos o los Juegos Panamericanos, entre otros, representan una oportunidad para fomentar estilos de vida saludables. “Estos eventos generan en la sociedad en la que se desarrollan, innumerables cambios que inciden, directa o indirectamente, en el estilo de vida propio de esa sociedad. Por ello, la celebración de los Juegos Panamericanos de 2011 no debe ser la excepción y deberán significar una oportunidad para los diversos organismos responsables del fomento y promoción de la práctica de actividad física y el deporte, visto no solamente desde la perspectiva de competencia, rendimiento, tecnificación y resultados, sino también la recreativa, divertida, placentera, agradable y saludable”.
Explica que sería conveniente, como ha ocurrido en otros países, realizar investigaciones ajenas al comité organizador, sobre la incidencia y repercusión de los juegos en la sociedad. “Relacionadas al conocimiento general de la población sobre los juegos, el pensamiento y opinión acerca de la incidencia de los mismos en lo social, económico y deportivo; la opinión sobre la labor que está desempeñando el comité organizador”.
Puntualizó que lo anterior permitirá un acercamiento con la población, ya que es conocido que eventos de esa magnitud generan grandes interrogantes, cómo si se agravaran los problemas de tráfico, mejorará la seguridad ciudadana, la imagen exterior de la ciudad, entre otras cuestiones.
