El primer paso que Estrella Araiza Briseño dio en el Festival Internacional de Cine en Guadalajara fue hace más de una década como prestadora de servicio social; desde entonces ha madurado diversas experiencias en la industria del cine hasta asumir la dirección general de este importante encuentro para la cinematografía de México y Latinoamérica, que ocurre en la Perla Tapatía.
A poco más de un mes de estar en este puesto, que hasta entonces ocupó Iván Trujillo, considera que el trabajo colaborativo es el reto que debe asumir frente a un gran equipo de profesionales en frente de secciones que van desde la programación comercial, el descubrimiento de nuevos talentos y la difusión de los proyectos emergentes, a lo largo y ancho del país.
“El festival ya está consolidado, lo que tendremos que hacer es poner el foco de atención a lo que mejor que sabemos hacer y resaltarlo. Es el primer año que anunciamos las master class como tal, pero todos los años las hemos realizado, en ese sentido, es importante que anunciemos cuáles son, quiénes vienen y quiénes pueden acudir. Hacemos muchas cosas en el FICG que a veces pasan desapercibidas”.
De igual forma, asume que el FICG tiene que fortalecer los vínculos con las escuelas donde se forma a los nuevos talentos, sobre todo los del occidente del país.
“Tenemos que enfocarnos en la conexión con los estudiantes y lo que se hace en Jalisco. Nosotros tenemos que poder responderles a ellos, que están estudiando una carrera de Cine o Medios Audiovisuales, para que ellos desarrollen el siguiente paso. Es simplemente accesibilizar muchas cosas, que es parte de un planteamiento estratégico que estamos trabajando y que se verá en la edición 35 del festival”.
Para esta edición, una decena de filmes creados por estudiantes y egresados de la Universidad de Guadalajara serán proyectados como parte del programa, la mayoría proveniente del Departamento de Imagen y Sonido (DIS) del Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño (CUAAD) y uno que sale de la licenciatura en Antropología del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH); al respecto, Araiza Briseño reconoce la calidad de dichos proyectos, por lo que considera apremiante trabajar aún más de cerca con los creadores.
“Son trabajos que tienen muchísima calidad, están empezando grandes trayectorias, entre ellos está el próximo Guillermo del Toro y no lo podemos dejar pasar. Ya hemos tenido acercamiento con muchas de las escuelas de Cine de Jalisco. Con el DIS tenemos una relación más cercana, pero claro, tenemos que ver cómo hacer más accesible la oferta cinematográfico en todos los centros de estudios universitarios”.
Sobre si en algún momento se había visualizado estando al mando del encuentro de cine más importante de Jalisco, Araiza Briseño explica que aunque por muchos años trabajó de cerca con el exdirector Iván Trujillo, “ocupar este nuevo cargo no era una meta que tuviera, aunque sabía que si un día me tocaba, pues me toca. Yo amo el proyecto del festival, yo me forjé en el FICG, inicié como prestadora de servicio social en la edición 19, entonces por supuesto que entiendo esto como un espacio de crecimiento”.
¿Qué satisfacciones le ha dado el FICG a Estrella Araiza? Ella asegura que todas, pero, de igual forma, las mayores sensaciones de estrés también.
Egresada del Tec de Monterrey, la ahora directora general del FICG trabajó en la Unidad de Cine de la Universidad de Guadalajara Cinefusión, después en la distribuidora Vendo Cine —su propia agencia de ventas internacional— y después como directora del Festival Internacional de Cine de Guadalajara en Los Ángeles.
“El éxito del proyecto sólo se puede hacer si se hace en forma colaborativa”, asegura.
