La noche en la que el gobierno federal decidió tomar las instalaciones de la empresa Luz y Fuerza del Centro, 44 mil trabajadores miembros del Sindicato Mexicano de Electricistas se quedaron sin empleo, con sólo dos caminos: aceptar su liquidación o rechazarla y manifestarse.
La empresa laboraba en números rojos, había que inyectarle cantidades millonarias cada año para su subsistencia, su capacidad de proveer el servicio era ya cuestionable y había que terminar con la corrupción y los privilegios que gozaban miembros del SME, esas fueron las principales justificaciones que ofreció el gobierno federal en voz del secretario de gobernación y del mismo presidente de la república.
Sin embargo, para especialistas e investigadores como la doctora Raquel Partida Rocha, profesora investigadora de la Universidad de Guadalajara, esta acción realizada por el gobierno de Felipe Calderón fue una actitud “muy reaccionaria”.
“Lo que se hizo por el presidente Felipe Calderón es muy lamentable ya que es un paso hacia atrás en la democracia de esta país, y un paso hacia atrás en el respeto a la institucionalidad y a los derechos laborales”.
De acuerdo con la especialista en asuntos laborales, el cierre de una empresa no es la solución para la pobreza que se vive en el país, si no al contrario rompe con el diálogo y la concertación que se había venido haciendo entre el Estado mexicano y las empresas paraestatales. “Hemos venido documentando y mostrando tiempo atrás que actualmente el Estado mexicano, de parte del Partido Acción Nacional, trae una contraofensiva sindical muy fuerte, el principal punto es, tratar de hacer desaparecer los sindicatos”.
Además señaló que la falta de experiencia y de visión del PAN, ha sido la principal razón por la que los sindicatos no son prioridad y no se incluyen en la agenda del Estado, como sucede en América Latina, especialmente en países como Brasil y Argentina.
La transformación
En días pasados, el presidente Felipe Calderón ha enfatizado en una transformación necesaria del país, señaló que esto no sucederá con el resto de los sindicatos, pero que el asunto de Luz y Fuerza del Centro era inevitable como difícil.
Respecto a esto, la doctora Partida Rocha lo calificó como “el inicio de un golpeteo”, además de ser lineamientos impuestos por Estados Unidos para una modernización del país en la que es necesario modificar a los sindicatos.
“No es borrando los sindicatos y los gremios como vas a arreglar la competitividad de un país, la modernidad y el progreso, es al contrario… la tendencia es a que los gremios sindicales se renueven se modernicen y que vayan acompañados con el proceso de globalización y la modernización”.
La profesora, quien además es miembro del Sistema Nacional de Investigadores, señaló que es absurdo pensar que 44 mil trabajadores eran los que estaban provocando la pobreza.
“Va a ser la violencia, va a ser el autoritarismo y va a ser el fascismo lo que va a llevar a estas transformaciones y no va a ser lo que ha mantenido el orden y la paz sociales en este país”.
Lo que sigue
“Se está dibujando un México que va a traer muchos conflictos en el 2010, esto no se va a quedar la gente de brazos cruzados”, señaló la profesora, quien manifestó su confianza en que hay gente que no permitirá que esto siga sucediendo.
Apegarse a la legalidad y seguirse manifestando es lo que les queda a los sindicalistas del SME, ya que la liquidación, dijo, en medio de la crisis más grande que enfrenta el país, no es suficiente, “¿le vas a poner un negocio de qué, a quién le vas a vender?”.
En cuanto al papel de los medios de comunicación en este panorama, la doctora opinó que los medios están inmersos en una situación de costo-beneficio.
“Son los medios de comunicación los que están fabricando una versión de un asunto que es muchísimo más complejo, hay mucha complicidad”.
