Hay pocas acciones que celebrar este 1 de mayo, Día internacional del trabajo. La mayoría de los empleos existentes en México no tienen la calidad ni la remuneración económica necesaria para que con un solo salario se mantenga una familia de cuatro miembros.
La clase obrera no ha visto mejoría en sus condiciones laborales ni económicas, a pesar de los compromisos hechos por diversos actores políticos, entre ellos el presidente Felipe Calderón, quien llegó al poder ejecutivo como “el presidente del empleo”.
¿Qué se puede celebrar este 1 de mayo?, se le preguntó al profesor investigador de la División de Contabilidad, del Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas (CUCEA), Antonio Sánchez Sierra: “A mí lo que me llama la atención es cómo cacaraquean (gobierno y sector privado) logros, cuando en realidad no son logros, porque son empleos golondrinos”; por ejemplo, “se construye una carretera y se crean 20 mil empleos; sí, pero son empleos que duran sólo tres meses”
Agregó: “¿Qué vamos a celebrar?, ¿que tenemos unos salarios de hambre?, ¿que tenemos salarios menores incluso que en Asia?, ¿que nuestro ingreso per cápita como trabajador es de los más pobres del mundo?”.
El Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) considera que de toda la fuerza laboral en su conjunto, estimada en 45 millones de personas, únicamente alrededor de 19 millones se encuentran inscritas en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
En Jalisco, con datos de la Delegación del IMSS, al cierre de enero de 2008, se tenía a un millón 250 mil 546 trabajadoras y trabajadores asegurados, de ese total, un millón 29 mil 650 son empleos permanentes y 220 mil 896 son eventuales.
Pero las cifras pueden ser engañosas: gobierno y patrones toman los datos del IMSS sin detallar los reingresos. Sánchez Sierra comentó que los sectores de la construcción y de la electrónica tienen mucha rotación de personal, se les da de baja y al cabo de varias semanas se les recontrata y las autoridades contabilizan las altas al IMSS de los reingresos como “nuevos empleos”.
Puntualizó que no es lo mismo empleo y trabajo: el empleo no es productivo y se da en el sector servicios; el trabajo sí es productivo para la sociedad, sin embargo, “quien tiene un trabajo, yo no veo que tenga mejorías salariales”.
El Centro Empresarial de Jalisco pronosticó que el sector privado generará este 2008, 60 mil empleos formales, pero en contraparte exige al gobierno incentivos económicos. El gobierno federal puso en marcha el programa Mi primer empleo, con pocos resultados, a decir de la Organización Internacional del Trabajo.
Y hay otro aspecto que sólo tendrá vigencia este 2008: descuento del cinco por ciento en las cuotas obrero-patronales. En ese sentido, José Armando Muñoz Salmón, jefe del Departamento de afiliación y cobranza de la delegación Jalisco del IMSS, informó que unas 74 mil empresas de la entidad recibieron a partir de marzo el beneficio del decreto presidencial del descuento del cinco por ciento en cuotas obrero-patronales, lo que equivale a un ahorro mensual de 45 millones de pesos.
Muñoz Salmón comentó que dicho programa es un apoyo del gobierno federal para incentivar la creación de empleos permanentes.
Ante la queja de patrones de que no hay condiciones para generar los empleos que requiere el país, el académico Sánchez Sierra expresó que en parte tienen razón, como lo es en la carga excesiva de impuestos, pero ciertamente “el empresario mexicano también es muy comodino”.
