Con la mirada en los Juegos Olímpicos

Iván Ruiz Muñoz, ciclista y entrenador egresado de la UdeG, entró recientemente al Salón de la Fama del deporte Jalisco

A los diez años Iván Ruiz Muñoz, disfrutaba recorrer las calles de su barrio montado en su bicicleta junto a su grupo de amigos. Después practicó la modalidad BMX, en el parque San Rafael e incursionó en las competencias, retirándose como atleta a los 27 años.

El egresado de la licenciatura en Cultura Física y Deportes de la UdeG, está ubicado como uno de los mejores entrenadores de ciclismo a nivel nacional, lo que le ha valido ser objeto de diversos reconocimientos, como el Premio Nacional de Deportes 2018, Premio Jalisco al Mérito Deportivo y su reciente ingreso al Salón de la Fama del deporte Jalisco. Hoy tiene el objetivo claro: los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.

¿Cómo nace tu gusto por el deporte?

Todo comienza desde la infancia, en el barrio nos encantaba andar en bicicleta, después se formalizó un poquito y en el parque San Rafael con un grupo de vecinos compramos bicicletas y empezó el auge de BMX, ahí es donde nace mi pasión por el tema, por una actividad más formal, por entrenar, prepararme para competencias y desde los 10 hasta los 27 años estuve compitiendo. En ese periodo eso decidí ingresar a la licenciatura en Cultura Física y Deportes, con una finalidad de saber cómo prepararme mejor, porque prácticamente en México no teníamos entrenadores de BMX, todo era de manera muy empírica. Cuando entré a la licenciatura me di cuenta que me apasionaba la preparación física, comencé a prepárame, a hacer algunos ajustes en la preparación personal.

¿Cuándo se convirtió en una actividad profesional?

Iniciamos un proyecto para un equipo particular y con él logramos trascender a nivel nacional e internacional. Una vez que entra a juegos olímpicos el BMX se empieza a formalizar y de ahí en adelante me lleva a las olimpiadas nacionales, campeonatos nacionales, a ser seleccionador nacional, estar participando en el ciclo olímpico y más adelante con atletas de la misma modalidad empezamos a incursionar en el ciclismo de pista y es ahí donde se detonan cosas más importantes, principalmente con Jessica Salazar, que viene de BMX, fuimos trascendiendo en el nivel internacional y mundial y ahora estamos con la posibilidad de alcanzar los Juegos Olímpicos

¿Alguna vez imaginaste todos estos logros?

Ha sido una vida muy padre, han sido años y años de preparación, muchos años de prueba y error, de toparse con pared y muchas alegrías que soñaba como todos, y ahora que está cerca, lo seguimos tomando como una parte del día a día con mucha concentración para que no nos distraigan las emociones y poder lograrlo antes de festejarlo.

Iván Ruiz Muñoz
Foto: Abraham Aréchiga

¿Qué representan los reconocimientos recibidos?

Mucha alegría, satisfacción, el poder recibir estos reconocimientos primero en el estado que es punta de lanza, que es mi casa, donde nací y me formé y que eso logre trascender a premios nacionales es un orgullo grande y es una carga de responsabilidad, porque ahora la gente espera más de nosotros, no queremos defraudar, creemos que hemos avanzado y a disfrutar el momento que toca disfrutar, pero a dar la vuelta a la página y continuar con lo que sigue.

¿Qué significó ingresar al Salón de la Fama del deporte de Jalisco?

Ha sido la cereza de tantas cosas que vivimos emocionantes, porque de alguna manera te inmortaliza en el tema deportivo, es un honor muy grande y compartirlo con tanta gente importante y que en activo sea merecedor a ser parte de ese grupo selecto es un orgullo muy grande.

¿Cuál ha sido la clave para destacar?

La concentración en el día a día en el desarrollo deportivo, hay que trabajar el doble porque además de preocuparse por los temas técnico-deportivos se debe de preocupar por la parte administrativa, política y ser cuidadosos con los pasos que se dan y dónde vas a concentrar tu energía. Es duro, pero creo que si uno de concentra en el deporte, entrenamiento, podemos aspirar a competirle a cualquiera.

¿Cuáles son tus sueños?

Se han cumplido muchos de ellos, pero el más importante, el más romántico por decirlo así, serían los Juegos Olímpicos y ganar una medalla, después de eso consolidarme como entrenador a nivel internacional y que los logros sean constantes.

¿Cuál es tu filosofía?

Trabajar duro, con conciencia, responsabilidad, apegado a la ciencia porque no queremos que los resultados sean por una coincidencia, queremos que sean un premio a los que realizamos previamente.