Comprender la realidad actual desde la Feria Internacional del Libro

FIL Ciencia, FIL Joven y el Foro OCDE presentaron charlas para reflexionar sobre temas que atañen a todos, como el cosmos y agujeros negros, la sexualidad y el género, y la pandemia y la recuperación post covid

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Foto: Abraham Aréchiga

FIL Ciencia

Con una charla que incluyó la simulación de un viaje a un agujero negroChristopher Galfard, estudioso del origen del Cosmos y quien fue discípulo del reconocido científico Stephen Hawking, compartió sus conocimientos en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL 2021).

Ante decenas de estudiantes, Galfard explicó cómo la física y las matemáticas han ayudado a comprender un poco más sobre el universo, donde aún falta mucho por conocer. Apuntó que la mejor herramienta para hacer predicciones a futuro es encontrar las leyes de la naturaleza.

En materia de agujeros negros, explicó que el más grande está al centro de nuestra galaxia, que absorbió todo lo que había alrededor, aunque existen millones de agujeros más pequeños.

“Tenemos los agujeros negros que son del tamaño de lo que queda cuando explotan las estrellas, o masivos como el de la galaxia. La primera imagen verdadera se tomó hace algunos años y muestra que lo que está en negro es, en realidad, su sombra, que oculta lo que está alrededor. A lo mejor hay algo más que no hemos encontrado y lo podemos ver al utilizar las leyes de la física cuántica, y reunirlas con las de gravedad para entender lo que ocurre dentro de los agujeros. No hemos llegado a eso, pero algún día será”, apuntó.

Foto: Abraham Aréchiga

Foro OCDE

Los países de América Latina y El Caribe necesitan un nuevo contrato social, afirmó Juan Vázquez, jefe adjunto del Centro de Desarrollo para América Latina y El Caribe, de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), durante su participación en la mesa “Hacia un nuevo contrato social: recuperación resiliente poscovid-19”.

 Este contrato social, dijo, debe ser un gran pacto entre grupos socioeconómicos para cerrar las brechas persistentes por género, por ingreso, raza y etnia; tiene que ser también un pacto entre territorios, que potencie sus capacidades, que genere mecanismos de redistribución justos, que cierre brechas territoriales; además debe ser pacto entre generaciones, ya que la dimensión intergeneracional del contrato social es fundamental, sobre todo en sociedades que están cada vez más envejecidas y los sistemas de pensiones son frágiles.

Subrayó que el contrato social debe girar en torno a tres ejes: 1. una estrategia productiva ambiciosa, que priorice la creación de empleos de calidad y aproveche las transiciones digital y verde; 2. sistemas de protección social más fuertes y mejor focalizados, y que avancen gradualmente hacia la universalización; y 3. Un modelo de financiamiento del desarrollo que sea sostenible y combine acciones respecto a impuestos gasto y deuda.

Foto: Iván Lara

FIL Joven

Está muy fácil: una persona trans es alguien que no se identifica con el género que le dijeron que tenía que asumir, sólo porque nació con una vulva o un pene. Una persona no binarie es alguien que no se identifica como hombre ni mujer, o quizá sí, pero ambas de forma temporal, al mismo tiempo o permanente. Y “elle” (“them” en inglés) es el pronombre que millones de personas en el mundo han decidido asumir, porque el de “él” y “ella” no les representa.

Para abundar en estos conceptos y lo urgente de la realidad que viven personas con identidades disidentes, se realizó la charla “Ellas, ellos, elles: una radiografía del mundo trans».

“Esa construcción de identidad es personal, pero (cuando se trata de ser trans) hay una presión social (patriarcal y machista) que asesina a las personas que no se sienten identificadas con lo que les dijeron que eran, basados en sus genitales”, dijo la artista Luisa Almaguer.

Foto: Abraham Aréchiga

“Los seres humanos construimos nuestra identidad a lo largo de nuestra vida”, añadió el activista Aletze Estrada, quien apuntó que hay personas que se descubren trans desde que son menores de edad hasta muchos años ya vividos.

En cuanto al uso de «elle», “los pronombres respetan la identidad de cada quien. Es como si llegaran y te dijeran un nombre que no es tuyo, es tan simple como eso: es una forma de respetar el pronombre con el que te identificas”, indicó Luisa Almaguer.

“El género es un constructo social. Hay que tener un poco más de curiosidad de lo que nos es ajeno. Está bien que no lo comprendas. Yo, aunque soy hombre trans, no sé lo que es ser una mujer trans ni una persona no binaria”, explicó Aletze Estrada.

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