Para hablar de la historia de la revista Luvina, se podrían dividir sus veinte años de vida en dos etapas: la de su fundación en 1996, y la del comienzo de su posicionamiento entre lectores y escritores, que se dio a partir de 2004.
Ahora, Luvina se concibe como una publicación que cumple la función de una ventana literaria, ya que se trabaja constantemente con diversos programas de promoción y difusión para que en sus páginas aparezcan textos de escritores jóvenes, aunados a propuestas literarias universales y de regiones diversas del mundo.
A su vez, los esfuerzos por promover la lectura y los distintos géneros literarios, se lleva a cabo a través del programa de Radio UdeG Luvina joven y el proyecto de talleres que lleva el mismo nombre, y que se realiza con estudiantes de la carrera de letras de Universidad de Guadalajara que acuden a los distintos planteles del Sistema de Educación Media Superior. Además, año con año realiza un concurso en las categorías de ensayo, cuento y poesía, el cual está vigente desde 2011 y que en la edición de este año —que está enmarcada del vigésimo aniversario de Luvina— presentará una edición especial de la revista, donde aparecerán los finalistas y ganadores del concurso de 2011 a 2016.
“En la publicación especial son setenta y dos los recursos literarios que participan”, comenta Sofía Rodríguez, coordinadora del programa Luvina Joven, y añade: “Esto es el resultado de un trabajo de los chicos de letras, que son quienes dan los talleres en las preparatorias y allí está el resultado de todo el trabajo entre slam poéticos, los talleres, la publicación de la revista, el programa de radio… Todo el año trabajamos con la ilusión de que la literatura llegue a más personas”.
El concurso se divide en dos ramas, que son Luvina Joven, destinada para escritores que participan en los talleres y que estudian el bachillerato; y el otro es Luvinarios, que tiene como meta a escritores que están en licenciatura; en ambos casos, deben ser alumnos activos de Universidad.
En esta edición del concurso los ganadores son: Luvina Joven/ Poesía: Raúl Zepeda Padilla, con “Ancora Spero”; Luvina Joven/ Cuento Breve: Karen Elizabeth Camacho Buenrostro, con “Masoquismo”; Luvina Joven/ Ensayo: Imelda Lizette Ledezma Carbajal, con “¡El suelo es un fisgón!”; Luvinaria/ Poesía: María del Pilar Ruiz Reyes, con “XXXI”; Luvinaria/ Cuento Breve: Jessica Dalhi Mateos Ramos, con “Belfo”, y Luvinaria/ Ensayo: Christian Alejandro Anguiano Molina, con “La condena de la eternidad”, quienes ya aparecerán en la edición especial de Luvina que agrupa cuentos, poesías y ensayos de escritores que han ganado en las ediciones pasadas y que llevará el nombre de “Escrituras en juego”.
“La literatura es juego, la creación artística es un juego —dice Silvia Eugenia Castillero, directora de la revista—. Entonces hay que jugar. Jugar es salirse de los linderos que te antepone la realidad para encontrar lo que no está. Para conquistar los conceptos y las imágenes que están más allá, a manera del ideal de Gastón Bachelard, y justamente es eso lo que ha logrado todo el esfuerzo del equipo de Luvina. Eso mismo es el motivo del nombre de la edición especial”.
Con respecto a los veinte años de la publicación, Castillero agrega que es un esfuerzo de estar presente en toda la Red UdeG, a tal grado que “se ha consolidado como una de las mejores revistas de México y en el extranjero nos aprecian mucho también. Porque nosotros publicamos autores de mucha trayectoria y gente muy importante, así como gente joven que es desconocida. Lo que nos ha sucedido es que durante estos veinte años, cuando publicamos a escritores que comienzan y que son como espontáneos desconocidos, luego se vuelven escritores conocidos con publicaciones en diversas revistas y con presentaciones de libros; muchos se han vuelto escritores con voz, eso ha sido una de las experiencias más interesantes del proyecto”.
