Un clima muy londinense

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    A última hora, y cuando ya estaba por comenzar la Feria Internacional del Libro en nuestra ciudad, cuyo invitado es el Reino Unido, la tormenta tropical “Sandra” dejó ante nuestro ojos un clima muy parecido al que —dice los poetas y la gente— es muy londinense. Tiempo nublado, llovizna en nuestros hombros, clima para abrigarse y mirar las calles, la ciudad, de otra manera. Bien por esa lluvia que abrió de manera muy adecuada las ganas de lanzarse por los caminos que llevan a la FIL. Si bien es cierto que todos los caminos llevan a la Feria, también es verdad que cuando llueve los melancólicos escriben poemas y, también, leen libros. Pues es bueno, entonces, que el clima nos vuelva a dejar esta gana de leer, de ir, de caminar, de estar en la lectura y, para poder tener libros, pues a la FIL, que ya está, que está bien. Que surte de nuevos bríos igual que este clima que tuvimos gracias a “Sandra”.

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