El astronauta méxico-estadounidense José Hernández visitó por primera vez el Festival Papirolas de la Universidad de Guadalajara, para narrar anécdotas de su vida y del espacio. En rueda de prensa se pronunció porque México invierta en educación, proyectos espaciales, y que los niños sueñen y trabajen por sus metas.
La Secretaría de Educación Pública debería impulsar en los niveles de primaria, secundaria y preparatoria, la creación de más programas con temas de ciencia, ingeniería, matemáticas y tecnología, puesto que a futuro empujarán la economía y el bienestar social en el país.
“Siempre he dicho que México es muy rico en recursos naturales, pero creo que nuestro más valioso recurso son los intelectuales. Entonces, hay que invertir en ellos (los niños) desde primaria, para despertar esa inquietud científica, y darles la oportunidad de que puedan entrar a una universidad como la Universidad de Guadalajara y estudiar ingeniería u otra ciencia”.
El ingeniero José Hernández también considera a Guadalajara como su casa, porque su familia es originaria de Michoacán. Además la ha visitado en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara. Dijo que le “inspira” acudir a estos foros para “recargar pilas” y agregó que debería replicarse Papirolas en otras ciudades del país.
Invitó a fomentar competencias de ciencia, matemáticas, robótica y creación de satélites; estos últimos pueden colgar de globos y enviarse a cuarenta kilómetros de altura, que es como “tentar el espacio”, para que puedan tomar fotografías y ver la curvatura del mundo y la oscuridad del espacio; si estos incluyen sensores, los estudiantes podrán obtener información valiosa de nuestra atmósfera.
Sobre la Agencia Espacial Mexicana, dijo que no criticará al organismo porque “están haciendo lo que pueden con el presupuesto que se les aporta”, el cual no aumenta desde su creación hace cuatro años, y cuestionó: “¿qué proyectos pueden armar sin presupuesto?”. Ante esto pidió al gobierno mexicano compromiso e inversión.
José Hernández, quien posteriormente dictó una conferencia en Papirolas, convocó a los niños y jóvenes a “soñar en grande” y “trabajar duro” para alcanzar sus metas. Sobre la participación de las mujeres en áreas de ingenierías y espaciales, planteó la necesidad de romper las barreras y mostrar con ejemplos que también pueden. Expresó que se convirtió en ambientalista cuando fue al espacio, por lo que hizo un llamado para aprovechar las energías renovables y disminuir el uso del gas o el petróleo.
