El otro día escuché el eslogan que salió de una campaña de Radio Universidad: “Sin fiesta no hay globito”. Frase cierta que no sólo hace alusión a la prevención de enfermedades de transmisión sexual, sino también, diría yo, a la prevención de embarazos, y evitar la deserción escolar.
De acuerdo a notas periodísticas es en alumnos de segundo y tercer grado de secundaria, así como de bachillerato, donde se da la deserción escolar por maternidad no planeada. Asimismo, cada año en México, cerca de un millón de embarazos corresponden a madres adolescentes.
Se dice que en nuestro país hay un rezago en educación sexual, los adolescentes están avanzados en el tema, mas no así las instituciones, comentaron en una ocasión los autores del libro Conéctate: sexualidad para adolescentes.
Los jóvenes gozamos de libertad, pero tenemos no sólo que ser responsables de nuestros actos, sino también tener perspectivas a largo plazo por nosotros y el país. Recordemos que nos dijeron: son “los niños del futuro”. ¿Se cumplió?
