México produce alrededor de 11 mil 700 millones de litros de leche al año, de los cuales alrededor del 50 por ciento (en líquido y subproductos) es “bronca”, es decir, no está pasteurizada, aseveró el académico e investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana, Jorge Saltijeral Oaxaca. Agregó que en la medida que no la sometan a estos procesos hay riesgos que el consumidor adquiera tuberculosis, brucelosis y otras infecciones.
Al participar en el Seminario DAAD Alumni “Enfermedades zoonóticas transmisibles por la leche”, organizado por el Centro Universitario de Ciencias Biológicas y Agropecuarias (CUCBA) y el Servicio Alemán de Intercambio Académico (DAAD por sus siglas en alemán), comentó que en México y algunas partes de Jalisco existen prevalencias elevadas de brucelosis y tuberculosis en el ganado.
Para el caso de la brucella existe prevalencia “muy elevada” en estados como Coahuila y Oaxaca, aunque hay otros con cero, como Sonora: “Esto significa que no es una cuestión homogénea en el país”.
Con respecto a la tuberculosis hay estados libres, como Sonora, pero en otros existen problemas en este rango, como en el Distrito Federal y el Estado de México.
Saltijeral comentó que en 2014 hubo más de 22 mil casos de brucelosis en mexicanos, ocasionados por consumir leche bronca de cabra; en tanto que en tuberculosis, considerada como emergente, hay muchos casos, de los que buena parte son de humano a humano, y de animal a humano por consumo de leche de vaca corresponde al 2 por ciento.
El jefe del Laboratorio de Mastitis y Diagnóstico Molecular del CUCBA, Hugo Castañeda Vázquez, comentó que la brucelosis es uno de los problemas que más preocupa, aunque reconoció que también existen las enterotoxinas y la E. coli, “o sea, diferentes enterobacterias que causan mastitis y que pueden ser eliminadas a través de la leche; y los problemas por Staphylococcus aureus, que tienen toxinas que causan diarrea al ser humano. Todos esos problemas de higiene son bastante relevantes”.
Otro punto a considerar radica en que México es uno de los principales importadores mundiales de productos lácteos, como caseína y grasa butírica, por lo que resulta necesaria una mayor vigilancia epidemiológica, añadió Castañeda Vázquez.
A pesar de los esfuerzos por disminuir estos males, los mismos son insuficientes, por lo que el Saltijeral se pronunció porque México los intensifique. Apuntó que uno de los errores de la política de las autoridades mexicanas es que no se paga al ganadero el valor de su ganado una vez que resulta positivo. “En muchos países del mundo que han erradicado las enfermedades, se diagnostica la vaca o la cabra, y en ese momento se tiene que sacrificar, y se le debe pagar el valor real del ganado” a su propietario.
El foro
Fue un esfuerzo conjunto entre México-Alemania, en el marco del año Dual. Su objetivo es la actualización y el intercambio de conocimientos entre especialistas de ambos países en temas como patógenos emergentes en lácteos, tuberculosis, inocuidad e higiene en leche en los ámbitos nacional e internacional, tratados los días 18 y 19 de mayo.
Hubo 16 ponencias impartidas por un grupo multidisciplinario integrado por veterinarios, químicos, biólogos y médicos humanos del CUCBA, de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, la Universidad Autónoma Metropolitana, el Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo, A.C. Sonora, la Universidad Autónoma de Sinaloa, el Cofocalec, A. C., la Universidad Veracruzana y el Instituto Tecnológico de Tlajomulco.
