Pintura itinerante y social

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Tras dos años de exhibición itinerante por algunas ciudades de México, en Guadalajara concluye la exposición de las obras pictóricas seleccionadas de la Bienal de Pintura José Atanasio Monroy en 2016.

La muestra —compuesta de forma original por cuarenta y siete obras— es una visión de lo que se produce en nuestro país, y da cuenta del sentir y pensar de los autores en aspectos como la inseguridad, la muerte, los feminicidios, entre otros.

Dicha muestra fue exhibida en el Museo de Arte Peter Gray, en Puerto Vallarta; en San Pedro Museo de Arte, en Puebla, y el Gran Museo del Mundo Maya, en Yucatán. Para esta última etapa son exhibidas treinta y tres piezas en el Museo de Arte Raúl Anguiano que estará hasta el 26 de agosto del presente año.

Un total de catorce obras ya fueron vendidas, por lo que no están presentes en esta última etapa presentada por el gobierno de Guadalajara, dicho museo, Cultura UDG y el Centro Universitario de la Costa Sur de la Universidad de Guadalajara, desde el pasado 6 de julio.

La curadora de las obras, Sac Nicté Couoh Magaña, coordinadora de Logística de la IV Bienal en CulturaUDG, habla sobre la muestra itinerante, los discursos de los autores y el cierre de la convocatoria del premio 2018.

Concluye el recorrido
Con esta última sede cerramos el recorrido itinerante que lleva desde hace dos años la exposición de la tercera Bienal de Pintura. Entonces, el jurado seleccionó cuarenta y siete piezas, entre las cuales están las seis ganadoras en ambas categorías y las seis menciones honoríficas. Desde ese momento la intención siempre fue que se diera a conocer a lo largo del país esta selección, que en cierta manera representa a la creación plástica actual en México en estas dos categorías, principalmente noveles, que es donde muchos jóvenes participan. Está perfecto que la muestra esté en los meses de julio y agosto en el museo, ya que éste se caracteriza por tener muchas actividades de verano. Entonces, muchos niños con sus papás van a visitarnos y también estas fechas son las que algunos estudiantes universitarios van a los museos.

La importancia de esta muestra itinerante
Se trata de que las obras seleccionadas sean vistas por la mayor gente posible, que conozcan lo que se está haciendo. El principal objetivo de este premio es difundir la creación plástica, principalmente la pintura, y está cumpliendo con este objetivo. Obviamente se integró por un jurado calificador experto, que seleccionó entre más de mil trecientas cincuenta piezas las últimas cuarenta y siete para decir: esto es lo que actualmente se está haciendo en la plástica nacional y es importante que se dé a conocer en el país, principalmente en Guadalajara y Autlán de Navarro, donde nació el premio.

Sobre los autores
Son treinta y tres. Tenemos de Jalisco, de la Ciudad de México, de Michoacán, de San Luis Potosí, entre otros. Es importante el diálogo que se hace entre las obras, porque obviamente es una diversidad de técnicas y una diversidad de conceptos y de discursos que manejan los artistas, y que estén todas integradas en una exposición nos muestra la diversidad que se tiene en el lenguaje plástico actual en México. Obviamente tenemos las dos grandes vertientes que se han manejado en el siglo XX en la pintura, que es la parte figurativa y la parte abstracta. No hay una prevalencia de la figura humana, aunque en la figurativa está un poco más presente, algunos son retratos de personas queridas, autorretratos, entre otros. También tenemos dos piezas muy fuertes sobre lo que está viviendo México. Por ejemplo, tenemos dos que tocan el tema de la inseguridad y toda esta cuestión de la muerte. Además, hay otras piezas oníricas, que juegan con el color y las texturas.

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