La Universidad de Guadalajara, ahora es cuando ocupa apoyo por parte del gobierno estatal, y este se lo está negando. Pero qué pasa cuando el grupo político se da “baños de pueblo”, al presumir que el Bicentenario de la Independencia fue todo un espectáculo y que la gente quedó maravillada y que el amor a la patria quedó plasmado en tal “fiestón”.
Pero qué pasa ahora cuando la necesidad de presupuesto para uno de los elementos básicos que propician el desarrollo de un país, que es la educación, se niega y se hacen los que no saben nada.
Cuando el gasto para las celebraciones de un año conmemorativo tres mil millones de pesos aproximadamente, sí importante pero que no puede sobrepasar lo que hoy puede ayudar a Jalisco y a México a ser un país que no sólo sea en donde se sueñe con ser un gran y famoso narcotraficante, sino ser alguien que pueda ayudar al desarrollo del país. Ahora el gobierno no quiere cumplir el compromiso de entregar 700 millones de pesos que son producto de convenios signados entre el gobierno del estado y la federación que ya cumplió con el 52 por ciento pactado en este convenio.
