El viernes fue el supuesto último día para el registro de celulares en el Renaut. La base de datos de millones de mexicanos ha aumentado y con ello, por abajo del agua, no faltará quien la venda a bancos, tiendas departamentales, entre otras instancias, para que además de molestar en domingos y días de guardar acerca de sus promociones, encontrarán a posibles deudores morosos.
En mi opinión esta base no puede ser confiable, ya sea porque llegue a manos no deseadas sino también porque la información no corresponde a la realidad. Es decir, es una base de datos alimentada por cualquier vecino, con datos del amigo, compañero o hasta de su hijo recién nacido.
Muchos celulares quedaron sin servicio, pero eso no bastará para comprar otro chip y registrar un nuevo número. Solución rápida para no estar incomunicado.
Una base de datos es un peligro, una herramienta más para el crimen organizado, no para localizar al crimen organizado. Nos falta mucho para jugar al espionaje. ¿Por qué se creen todo lo que pasa en CSI NY?
