En Inred, A. C. pensamos que es deseable que las personas atendamos los deberes y obligaciones, con base en las relaciones que vamos estableciendo y de acuerdo a los ideales que nos vamos proponiendo, social, histórica y personalmente. Estos tres niveles establecen diferencias en el cumplimiento de los deberes.
El nivel social propondrá sus ideales con base en la viabilidad del colectivo, pero entrará en una tensión (que debe respetar y es la función concreta de los derechos humanos) con el nivel personal.
Esta tensión disminuiría si cada uno de nosotros nos proponemos cumplir razonablemente con esos deberes y convertirnos en personas responsables de nuestros actos, ya que la sociedad en su conjunto no estimula tales acciones. En México es común escuchar la conjugación “se”: se cayó, se perdió, se manchó, se descompuso. Jamás empleamos un sujeto “responsable” de lo sucedido. Todo acontece por obra divina, fantasmal o por generación espontánea.
¿No es corrupción esconder nuestro actuar? En Inred, A.C., creemos que sí. Te sugiero que tengas los calzones o las pantaletas para responsabilizarte de lo que haces y asumir las consecuencias. ¿Temes perder tu máscara de “gente bien”?
