La Primavera en estado crítico

670

El bosque de La Primavera requiere un plan de emergencia que detenga la expansión urbana y demográfica no controlada y regule proyectos como la geotermia, ya que éstas y otras presiones colocan al área natural en estado crítico, opinó el investigador del Centro Universitario de Ciencias Biológicas y Agropecuarias (CUCBA) de la UdeG, Arturo Curiel Ballesteros.
 


Planteó que en los primeros borradores del programa de manejo del bosque se mencionaban 15 presiones, en tanto que ahora son 30; es decir, se han duplicado y diversificado. Una es referente al crecimiento que no sólo se da al oriente del bosque, sino también al norte; otro tema es de los incendios forestales, en 2005 y 2012 estos siniestros afectaron más de 50 por ciento del bosque, es decir, 19 mil hectáreas.
 


Lo anterior fue señalado en rueda de prensa por miembros de los comités científico y ciudadano del Organismo Público Descentralizado (OPD) Bosque La Primavera, para emitir una declaración luego del seminario “Conservando desde lo colectivo”, efectuado en abril.

El acto tiene como marco el décimo aniversario del nombramiento de La Primavera como Reserva de la biósfera por la Unesco, y el Día Mundial del Medio Ambiente, el 5 de junio.
 


Curiel Ballesteros, quien forma parte del Comité Científico del bosque y Sandra Valdés Valdés, académica del ITESO y representante del Comité Ciudadano del OPD, expresaron su preocupación por el proyecto de geotermia que podría darse en seis mil hectáreas de dos zonas núcleo del bosque, y donde hay una mejor conservación natural. Dicho proyecto pudiera afectar los servicios ambientales del macizo forestal.
 


Valdés Valdés comentó que de acuerdo con estudios, “en lo que consideramos zona de amortiguamiento para el bosque, tenemos 35 por ciento de urbanización, pero también nos hemos dado cuenta de que es exponencial el crecimiento”, el cual se da sobre todo en el municipio de Zapopan.
 


“Históricamente, los planes de desarrollo y los planes parciales se han diseñado en función de la infraestructura que requiere la ciudad”, agregó la académica, pero no consideran la fragilidad ambiental aledaña al bosque; por ende, consideró necesario cambiar de paradigma y valorarlo como parte del eje del desarrollo, de la calidad de vida y la salud de los habitantes de la ZMG.


Curiel Ballesteros subrayó que el bosque debe ser visto como “capital natural” por encima de cualquier interés particular o proyecto. En el bosque existe 30 por ciento de los mamíferos de Jalisco, como el puma; tiene 30 por ciento de anfibios, 25 de reptiles y 40 de orquídeas terrestres. Además, posee especies que sólo se encuentran en este sitio.

Artículo anteriorJefes de departamento Red Universitaria período 2016-2019
Artículo siguienteAcuerdo: Lineamientos para el Programa de Adquisición de Material Bibliográfico (Acervo) y Equipo de Bibliotecas.