Señores, mi más grande felicitación por su cada vez más prestigiada publicación La gaceta, enhorabuena y que continúen su publicación.
El motivo de esta misiva es dar a conocer el fraude que se ha cometido en contra de mi esposa, quien desde  hace 23 años es socia de la Caja de Ahorro Popular San Pablo S.C. de A.P. de R.L. de C.V.
Por varios años ha estado pagando una cuota especial, que es un fondo funerario para sus padres. Recientemente falleció el profesor Raimundo Lizola Gómez, padre de mi esposa, quien solicitó de inmediato la atención funeraria correspondiente, con la promesa de pago de 10 mil pesos para cubrir dichos gastos.
Acudimos a las oficinas de la Caja de Ahorro, donde se negaron a pagar la cantidad reclamada, pretextando que no había cumplimiento de pagos por parte de mi esposa. Siendo que tenemos en nuestro poder los pagos realizados.
Ante la delegación de PROFECO nos quejamos, pero ellos no tienen ninguna autoridad ante las fraudulentas cajas de ahorro. CONDESEF, por su parte, también nos negó la ayuda, dado que no tienen registrada a la Caja de Ahorro Popular San Pablo.
Cómo es posible que no exista ninguna autoridad que obligue y permita a estas instituciones abusivas y rateras que se queden con la aportación de nuestras cuotas y nos digan simplemente que no nos pueden pagar. Esta es una manera de alertar a las personas que depositan su dinero en estas cajas de ahorro ladronas y pierdan sus ahorros de toda la vida.
