Fomentan la equidad de género entre los jóvenes

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    Siete de cada 10 jóvenes universitarios de Colotlán, cuyas edades oscilan entre los 17 y 29 años, tienen una visión machista y tradicionalista en torno a las relaciones de pareja, arroja un estudio que encabezó el investigador Mario Alberto Morales Martínez y en el que participó Nadia Yazmín Ocampo Álvarez, ambos académicos del Centro Universitario del Norte (CUNorte).

    Para propiciar un cambio de mentalidad entre los jóvenes y que podría después permear a la población en general, en CUNorte tomaron cartas en el asunto al implementar un programa integral de equidad de género, que implica, entre otras medidas, la investigación, la intervención de los contenidos de los programas de estudio con enfoque de género y la difusión de ideas que promuevan la equidad entre mujeres y hombres, explicó Alberto Morales.

    Los investigadores determinaron la proporción de jóvenes con una perspectiva que no propicia la paridad después de aplicar cuestionarios a cerca de 435 estudiantes, de los cuales 188 son hombres y 247 mujeres del mencionado núcleo universitario, para evaluar sus visiones en cuanto a la relación de pareja. La investigación fue realizada durante 2017.

    El punto de vista sexista de los jóvenes implica que la mujer tiene que dedicarse a las labores domésticas, que ellas deben someterse a lo que los varones decidan, y que éstos son los que toman las decisiones en el hogar, explicó el académico.

    Cuando a los estudiantes se les hace la pregunta de si la mujer debe acatar lo que dice el hombre sobre cómo vestirse o si son iguales en la toma de decisiones, en el trabajo o en las obligaciones del hogar, afirman que el hombre tiene preferencia y dominio en cada uno de estos rubros.

    “Es considerado normal, en muchos casos, que el hombre quiera controlar y que el mecanismo de control sea violento. Suelen no percibirlo como algo inadecuado”.

    Estos puntos de vista se deben a que los jóvenes, tanto hombres como mujeres, fueron educados desde la niñez bajo esta perspectiva, y es difícil lograr el cambio de la noche a la mañana, a pesar de cursar un nivel universitario.

    Si siete de cada 10 estudiantes asumen actitudes machistas, aclaró el investigador, los restantes tres tienen una perspectiva que oscila de lo menos tradicional a lo más trascendente en cuanto a las relaciones de pareja.

    Más trascendente significa en este caso, una visión de los roles de género que se aleja gradualmente de la perspectiva tradicional. Bajo este punto de vista hay mayor equidad entre hombres y mujeres al aceptar los mismos derechos y responsabilidades para todos.

    Los que resultaron tener actitudes más trascendentes son el cinco por ciento de la muestra, compuesto por más mujeres que hombres.

    Los resultados de la investigación son un indicio para poder explicar las actitudes que prevalecen en muchos sectores de la población en el ámbito estatal, donde se calcula que ocho de cada 10 mujeres que viven una relación de pareja en que han sufrido o sufren algún tipo de violencia.

    En cuanto al municipio de Colotlán, los reportes del personal del DIF municipal hacen sospechar al investigador que el problema podría ser mayor, puesto que sólo fueron reportados 148 casos de violencia física y económica en contra de las mujeres en 2017.

    “La proporción reportada es baja si se considera que la población es superior a los 18 mil habitantes y cerca de cinco mil hogares”.

    Además, en la región Norte, en donde está ubicado el municipio de Colotlán, los niveles educativos suelen ser bajos. El promedio de escolaridad es de siete u ocho años. “Los estudios indican que entre más baja es la escolaridad, las actitudes tradicionales en las personas se preservan”.

    Para determinar, entre otros aspectos, las condiciones y características de la violencia en las relaciones de pareja, el investigador realiza el estudio Redes de apoyo social, bienestar subjetivo y en la pareja en Colotlán, México, y Montería, Colombia. Un estudio intercultural.

    “Pensamos que mediante la aplicación de cuestionarios y entrevistas vamos a encontrar condiciones y características de la violencia en la pareja en Colotlán”.

    El investigador delimitó un universo de 500 personas, de las cuales alrededor de 55 por ciento son mujeres y el resto hombres, con el fin de que la muestra sea representativa.

    Muchas de las preguntas están enfocadas a detectar el tipo de agresión que sufren las mujeres en sus relaciones de pareja, y se toman en cuenta si han sido insultadas, si esto se ha hecho en público, si las han humillado o sufrido violencia psicológica, por ejemplo.

    En octubre del año pasado el equipo encabezado por Mario Alberto Morales inició el proyecto de investigación. Para mayo está programado que concluya el análisis de datos, para posteriormente emitir el reporte técnico en junio, y a partir de julio podrían reportarse resultados.

    Con éstos se hará un comparativo con lo que sucede en Montería, donde hay un proyecto similar que dirige el investigador José Celedón, de la Universidad Cooperativa de Colombia.

    El equipo de investigación en CUNorte está conformado, además, por Juan Alberto Hernández Padilla y Miriam Yolanda Arriaga Tapia, los dos académicos de CUNorte.

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