Faltan historias por contar

936

Con libros que pretenden recuperar la memoria y contenidos necesarios para estar en el debate político, Grietas Editores lanzó la colección “Archivo, memoria de la resistencia en Jalisco”, de la cual lleva ya dos títulos. Uno de éstos es Voces de fuego. La prensa guerrillera en Jalisco, el cual considera “testimoniales y libros que quieren aportar a la recuperación de la memoria de la guerrilla en México”, dice Jorge Regalado, investigador del Departamento de Estudios sobre Movimientos Sociales (Desmos), del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades, e integrante del equipo editorial.

“Nos estamos enfocando a la guerra sucia que el Estado implementó en contra de la guerrilla en 1970 y que tuvo resultados dramáticos. Aunque hay una producción que se puede considerar importante, quedan muchos capítulos por recuperar, muchas visiones por recuperar y específicamente en lo acontecido en Jalisco, en la ciudad de Guadalajara. Hay mucha materia para trabajar”.

Entrevistado en su oficina, donde muestra otros títulos de Grietas Editores, Jorge Regalado rememora que fue un periodo complicado, difícil, en el que muchas personas murieron y hay muchas heridas e historias por conocer, “para seguir debatiendo con esta tesis dominante de que la sociedad jalisciense es conservadora y apática y cosas que se vienen diciendo. Por supuesto que Jalisco y el país entero tiene una veta conservadora y apática, pero también otra veta radical, liberal, progresista, democrática, la que generalmente es la que se encubre”.

En los dos libros de la colección “Archivo, memoria de la resistencia en Jalisco”, hay textos de Rubén Martín, Rafael Sandoval, Miguel Topete, Jesús Zamora, Juan Antonio Castañeda y Armando Rentería.

¿Estos autores tenían espacios en otras editoriales o no?
No sabemos, probablemente no. Quizá son autores que tampoco están interesados en publicarse ni en hacerse ricos. Incluso algunos de esos autores, que por cierto no son malos para escribir, apenas están llegando a la consideración de que es momento de hablar y dar a conocer su versión. Tampoco hay una pretensión de decir que esa es la versión, la historia. Es una versión más de lo que a ellos les tocó vivir. Ahora lo hacen con una visión crítica, autocrítica de su propia práctica, de su propia vivencia y, bueno, no ha sido fácil. Es muy complicado hacerlo, porque en México hay formas de hacer política y está la oferta de la lucha armada.

¿Era el momento adecuado para decir su verdad?
Si se dio es porque tenía que darse. Ellos ya escribieron, pero hay muchas personas más, porque en ese movimiento participó mucha gente y que no ha llegado a la decisión de dar su versión. Algunos que estamos en el proyecto editorial Grietas, tuvimos participación desde los años setenta, en un poquito en ese tema que hoy se llamaría de la defensa de los derechos humanos, pero en aquel tiempo sería la lucha contra la represión. Muchos estuvimos en la lucha por los presos políticos, en la lucha por los desaparecidos, pero no establecimos relaciones orgánicas. No coincidíamos, por ejemplo, en la cuestión del uso de las armas y la violencia. Aunque no se coincidía con esa vía, habría que luchar por las libertades y los derechos.

Sobre la editorial
Jorge Regalado adelantó que están preparando un tercer libro de la colección, pero “no tenemos fijo cuántos textos vayan a editarse en esta serie. Eso depende de varias cuestiones, entre otras, del trabajo que veníamos haciendo de manera colectiva en la sistematización y la revisión de un archivo documental que existe. Se está trabajando con sobrevivientes de la guerrilla urbana de los años setenta en México, que aportó el archivo documental que se está trabajando”.
El esquema de Grieta Editores pretende darle la vuelta a las editoriales comerciales y a la propiedad intelectual, para que el libro circule, ya que pueden descargarse en formato PDF en internet.

Grietas Editores “aspira a ser una especie de cooperativa editorial autónoma. No aspira a ser un negocio, no quiere ser una editorial comercial. No pretendemos ganar dinero con ella. Ni siquiera estamos interesados en entrar en las redes mercantiles de los libros”, apunta el investigador del Desmos.

“Es un proyecto editorial que sí pretende que técnicamente sea bueno en su presentación física, que tenga buenos diseños, pero también con contenidos que nos parezcan pertinentes, necesarios, para estar en el debate político desde una perspectiva no académica, pero sí rigurosa en el planteamiento. Estar en el debate político desde una perspectiva o desde una posición no liberal. Digamos que prácticamente es una editorial que surge con una definición política cercana al pensamiento zapatista actual, pero junto al pensamiento democrático libertario en general”.

Artículo anteriorRasgos de identidad
Artículo siguienteEn extinción