Las universidades parten del principio de inclusión. “Universo”, todos los mundos que caben en un aula. Todas las ideas que caben en una clase. Todos los universos que exploramos con la guía de un profesor.
No conozco un profesor universitario que no aspire a incluir, que no aspire a unir, que no aspire a abrir puertas donde están cerradas y que no aspire a que con el conocimiento seamos todos, cada día, un poco más iguales. Por eso me siento profesor universitario como ninguno, porque creo en la universalidad del saber y que a través de éste, cada día rompemos las barreras que nos separan unos de otros.
La democracia es la piedra angular del proyecto que tenemos en el STAUdeG. Desde mi toma de protesta, no hemos vacilado en la intención de hacer que las decisiones las tomemos todos. La consulta fue un paso en esa dirección. Nuestro compromiso con la transparencia ante el ITEI, aceptando cumplir obligaciones que ni la ley nos exige, es una prueba más. Lo reitero, de mi parte no verán ninguna duda: tenemos la convicción de hacer del STAUdeG no sólo un motivo de orgullo para los académicos, por su presencia y lucha incesante por los derechos laborales de los profesores, sino también porque queremos un gremio de puertas abiertas, un sindicato democrático e incluyente.
El viernes pasado encabezamos una serie de reformas trascendentales a los estatutos de nuestro STAUdeG. Son muchísimos. Cito algunos: cambio a los requisitos de elegibilidad para permitir que ahora no sólo los profesores con contrato definitivo puedan ser delegados. Abrimos el abanico. Queremos que más profesores participen en la vida sindical. También, nada de jugar en dos pistas: todo aquel que busque un cargo en la administración pública deberá separarse al menos seis meses antes de la elección del Comité Ejecutivo, delegacional o de la Comisión de Vigilancia Delegacional. Rechazamos posibles conflictos de interés y reafirmamos que los representantes gremiales deben obedecer sólo al mandato de los sindicalizados. También ampliamos la representación a jubilados y pensionados, a través de un miembro de este grupo con voz y voto a propuesta del Comité Ejecutivo del STAUdeG.
Como pueden ver, todos los cambios aprobados mejoran la representatividad del profesorado y permiten incluir a más profesores en la vida de nuestro sindicato. Avanzamos, conquistamos mayor pluralidad, pero siempre respetando los derechos de todos los profesores que por años han luchado por un sindicato activo, democrático y plural. Con acciones como éstas reafirmamos nuestro compromiso con la construcción de un gremio moderno y democrático.
Gracias a todos los delegados que por amplia mayoría aprobaron estos cambios. También gracias a aquellos que se opusieron y con sus argumentos enriquecieron los cambios al final materializados. Con sano debate vamos en el camino correcto.
