Desde las últimas décadas del siglo XX hasta la actualidad, en nuestro país ha incrementado exponencialmente la tasa de emigración hacia Estados Unidos, de personas pertenecientes a etnias nativas de México, porque estas personas buscan una mejor calidad de vida para ellos y su familia.
Esto ha traído como consecuencia la pérdida de tradiciones, ya que las personas que emigran a Estados Unidos pertenecen a etnias en situación de pobreza extrema y a las que les es casi imposible mantener a su familia, por lo cual deciden irse, lo que deja a las futuras generaciones sin el aprendizaje para seguir conservando las tradiciones de su etnia.
Lo más preocupante es que año con año esta cifra aumenta, sin importar el maltrato que reciben al ingresar al vecino país del norte.
De continuar esta tendencia, en algunas décadas no tendremos la diversidad cultural que tanto caracteriza a México y que lo distingue de los demás países.
