Diego Giovanni Vargas Montes

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Con ingenio y gusto por lo audiovisual, Diego Giovanni Vargas Montes, alumno de la licenciatura en Nutrición, del Centro Universitario de Tonalá (CUTonalá), propuso una alternativa para educar a refugiados en aspectos nutricionales.

Se trata de un video colorido y animado en el que, durante cuatro minutos, el joven de 22 años de edad expone opciones para que estas personas y sus familias elaboren alimentos a bajo costo, nutritivos, inocuos y amigables con el medio ambiente, e incluso que tengan un ingreso económico.

Con este material participó en la campaña #conlosrefugiados, convocada por la Agencia de la ONU para los refugiados (Acnur) y MTV Latinoamerica, cuya meta consiste en ayudar a personas o familias que escapan de su país ante diversas situaciones. El objetivo final es que tengan mejores condiciones de vida. “Todos tenemos derecho a ser felices, a una alimentación sana y a empezar una nueva vida”, concluye el trabajo.

Vargas Montes compitió contra otros jóvenes de América Latina en formatos de video, imagen y ensayo. Con su proyecto obtuvo el primer lugar.

¿Por qué participar en esta campaña?
Me llamó la atención porque siempre me ha gustado ayudar. Vi la convocatoria y pensé ¿por qué no?, voy a checar las bases y condiciones; y como estaba de vacaciones, aproveché para hacer un buen video y una buena propuesta. Me enfoqué en el formato de video porque se me facilita. En fechas recientes había hecho otro trabajo escolar con similares características, en el que abordaba la diabetes, y gustó entre profesores y compañeros.

¿Cuál fue la propuesta?
Principalmente se basa en lo nutricional, porque, como sabemos, al salir de su país sin sustento económico o con poco dinero, lo emplean para transportarse o beber agua, pero a la hora de comer no saben qué alimentos comprar o cuáles son los que pueden aprovechar de mejor manera. Propuse ir a los puntos donde se encuentran los refugiados y albergues para brindar educación nutricional; que si tienen cinco o 10 pesos, puedan hacer una combinación de alimentos para obtener mejores beneficios. De igual manera hice otras propuestas de activación física. Para las mujeres formulé un taller de recetas a bajo costo y que puedan rendir para toda la familia. Hice hincapié en los pequeños, para que mediante dibujos y actividades adopten hábitos más sanos y con esto eviten la obesidad.

¿Cuál fue el premio?
Parte del premio consistía en viajar, conocer y hacer un reportaje. Fui a Tabasco dos días: el primero fue un recorrido para conocer la ciudad. El segundo grabé el reportaje para MTV, en el cual hablé sobre la casa de jóvenes El Colibrí, y el tercer día regresé a la Ciudad de México. Ahí tuve la oportunidad de presentar mi video y la propuesta con algunos refugiados y personal de Acnur.

¿Con qué experiencias y conocimientos te quedas?
Muchas. La más importante es que me está generando conciencia en torno a los refugiados y las condiciones que viven en los países que son acogidos. La segunda es que si realmente te lo propones, te apasiona ayudar o hacer lo que sea, no se necesita ser el gran científico para lograrlo.

¿Qué opinas de la UdeG?
El centro universitario en que estoy, la verdad, ha ido evolucionando e innovando en cuanto a la ecología y otras cosas, por lo que pienso que la Universidad tiene mucho potencial y nos da la oportunidad a los alumnos para que podamos realizar nuestros proyectos. Los maestros son parte importante de todo el conocimiento que vi reflejado en esta propuesta.

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