En una conversación sobre el arte de la escritura, Mario Vargas Llosa decía que “la literatura no se agota en la lectura, que tiene un efecto sobre el conjunto de la sociedad, y que es un efecto beneficioso”. Y el video de esta charla está dispuesto en la página electrónica de la Cátedra que lleva su nombre, creada en 2011 a instancias de la Fundación Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes y de universidades de España que le habían concedido al Premio Nobel algún doctorado o reconocimiento de relevancia.
Posteriormente se incorporarían otras instituciones, entre ellas la Universidad de Guadalajara.
En el acto de la inauguración de la Cátedra Vargas Llosa diría que ésta servía para que en libertad hubiera “un espacio para que escritores de las dos orillas del Atlántico puedan dialogar, acercarse, buscar ideas para hacer frente a los retos culturales, políticos, sociales y económicos”.
Bajo estos antecedentes, en la FIL, en el marco de la cátedra, se presentará la mesa La literatura sigue siendo fuego, en la que participan los escritores Rodrigo Blanco, Pola Oloixarac y Carlos Granés. Esto se realizará en el Salón Juan José Arreola, de las 17:00 a las 18:50 horas.
Volviendo al diálogo de Vargas Llosa, él se preguntaba por qué regímenes autoritarios “han tenido siempre gran desconfianza hacia la literatura, y han establecido sistemas de censura para controlarla, como si sospecharan que esa actividad librada a sí misma, es peligrosa para lo que ellos pretenden. No se han equivocado; la literatura tiene un efecto subversivo. Cuando nosotros leemos un libro que nos emociona profundamente y regresamos de esa lectura al mundo real, somos mucho más críticos frente a ese mundo que antes”.
