Crece el saqueo de huevos de tortuga marina

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    El saqueo de huevos de tortuga marina en el campamento La gloria, en el municipio de Tomatlán, Jalisco, aumentó 25 por ciento respecto al año pasado, porque ha faltado apoyo de la Secretaría de Marina y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente.
    Así lo informó el investigador del Centro Universitario de la Costa Sur (CUCSur), José Antonio Trejo Robles, quien agregó que en el 2004 fueron colectados 75 por ciento de los nidos, mientras que para este 2005, con la poca participación de las autoridades han rescatado 50 o 55 por ciento.
    Además hay bastante mortalidad de hembras. Diario los biólogos y personas de la cooperativa de Cruz de Loreto encuentran por lo menos una sacrificada. “No podemos hacer inspecciones hasta el monte, donde los saqueadores llevan a las tortugas, pero hemos podido verificar que diario sacrifican una o dos en el santuario del playón de Mismaloya”.
    El biólogo universitario explicó que en el 2004 recolectaron dos mil 150 nidos protegidos y liberaron más de 124 mil crías. “Quisiéramos rebasar esas metas, pero lo vemos difícil”. Hasta el momento llevan mil 755, pero queda un mes o mes y medio de labor, por lo que esperan por lo menos liberar 100 mil crías.
    En los dos años anteriores hubo mucho apoyo de elementos de la Marina, quienes permanecían por lo menos cinco días a la semana y evitaban la llegada de depredadores, los cuales este año han crecido el doble, pues nadie hace valer la ley. Consideró que el poco apoyo de las autoridades podría ser por la atención dirigida al sureste mexicano con el paso de los huracanes.
    “Nosotros hacemos lo posible para convencer a los predadores, para ganarles en el trabajo: patrullamos de manera más continua, nos turnamos para sembrar nidos y recoger crías, pero son más ellos”. Estiman que 27 provienen de la Cruz de Loreto y otros 16 de Lomas coloradas y La gloria, sin contar a los cazadores naturales.
    El problema es que en 20 kilómetros de playa, a los saqueadores les toca de 800 metros por persona, labor que realizan con caballo, mientras que los biólogos y colaboradores son cuatro y emplean dos cuatrimotos, lo que genera una desventaja numérica para proteger este quelonio.
    Recordó que a las costas jaliscienses arriban cuatro de las ocho especies de tortuga marina que existen en el mundo (laúd, carey, prieta y golfina). Todas las especies están en peligro de extinción, situación originada por la depredación humana y la baja sobrevivencia. De acuerdo con cálculos, de mil crías, cuatro llegarán a la edad adulta.
    El programa de Conservación de tortuga marina, del CUCSur, enfrentó una falta de recursos. En promedio requieren 120 mil pesos anuales, sin embargo, este año solo recabaron más de 92 mil. A pesar de esto, como cada año efectúan labores de patrullaje, colecta e incubación de huevos, liberación de crías, educación ambiental, ayuda comunitaria e investigación.
    Para apoyar esta labor, la ciudadanía en general puede participar en los campamentos tortugueros o realizar un donativo a la cuenta 90000021395, de Banamex, así como llamar al teléfono 01 (315) 355 63 30.

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