En el marco del Día Mundial del Medio Ambiente, el Rector general de la Universidad de Guadalajara, Carlos Briseño Torres, lamentó que la falta de acciones nos puede llevar a perder el tercer lago de América, perder diversas especies animales y vegetales, destruir una gran fuente de abastecimiento de agua para la Zona Metropolitana de Guadalajara, quedarnos con tierras improductivas por la gran contaminación y generar un gran riesgo de salud para la población.
Durante su participación en el Foro “La crisis ambiental de Chapala y sus efectos en el medio ambiente”, realizado en el Centro de la Amistad Internacional, sostuvo que la problemática en torno al Lago de Chapala es muy variada e implica atenderlo como un problema ambiental, social y de salud pública.
“Su solución pasa por decisiones de políticas públicas y de agenda legislativa que garanticen la adecuada suficiencia y calidad del agua que se recibe”.
Es necesario tomar medidas, precisó, para que Chapala conserve un mínimo de aproximadamente cinco mil 700 a seis mil millones de metros cúbicos, que representa el 70 por ciento de su capacidad total, para que logremos su subsistencia de por vida.
De este modo se obligaría a que el gobierno federal decrete un programa integral de recuperación y conservación de la cuenca hidrológica Lerma-Chapala-Santiago, “en dicha declaratoria se pueden aplicar fondos emergentes para las actividades que resulten necesarias, lo que implicaría la obligatoriedad de la coordinación entre las diversas dependencias federales involucradas y autoridades estatales y municipales”.
Recordó que el ex senador de la República, Raymundo Gómez Flores, presentó una iniciativa en diciembre de 2002, para declarar la cuenca Lerma-Chapala, como zona de restauración ecológica y de reservas de agua.