En Guadalajara abundan los talentos, pero son pocos los que deciden permanecer aquí, pues a pesar de que es una ciudad de importancia económica, el movimiento cultural no convence a todos, considera José Luis Coronado Vázquez, uno de los miembros de la producta Entrepuentes, quien le apuesta a los artistas locales.
Entrepuentes nació con el objetivo de promover la cultura mediante la articulación de todos los involucrados en ella: productores, artistas, gestores y público.
“Nos interesa apoyar a los creadores locales de cualquier ámbito. Quizá lo que nos ha hecho falta es organizarnos, lograr más sinergias e infraestructura. Hay pocos proyectos sólidos en la ciudad, que se queden y trabajen desde aquí”.
Con tan solo unos meses como productora, Entrepuentes ya tiene en puerta múltiples eventos para julio y agosto.
“La idea es apoyar las artes escénicas, plásticas y musicales. Es difícil trabajar con un solo lenguaje. La gente busca espectáculos diversos e integrados. Entrepuentes colaborará en algunos proyectos concretos, pero deberá crecer e irá segmentándose”.
En la segunda quincena de julio presentarán el espectáculo de danza contemporánea “Juárez: una fragilidad inocente”, del grupo Fascia, dirigido por Víctor Arce.
El montaje habla sobre la violencia contra la mujer y vendrá acompañado por un fragmento del radiorreportaje “La cruz de Juárez”, de Radio Universidad, que ganó el premio Prensa libre en 2003, así como por el video Mujer rota, dirigido por Jéssica Cruz, trabajo galardonado en el festival Chroma 2004 y en el Festival de video arte en Argentina.
“Con este espectáculo vamos a colaborar en lo tocante a las relaciones públicas. Es una producción grande que cuenta con una beca de coinversión a proyectos culturales del Conaculta (Consejo Nacional para la Cultura y las Artes). El estreno será en Guadalajara, probablemente en el teatro Diana, pero también habrá presentaciones en el Foro de arte y cultura, y en otras plazas de Saltillo, San Luis Potosí, Guanajuato y el Distrito Federal”, explica Coronado Vázquez.
Pero ya que la cocina también es cultura, echarán a andar lo que hasta ahora llaman “las noches temáticas” en el café La tentación, cuyos propietarios quieren consolidar como un espacio para las artes. Cada noche habrá diversas actividades en torno a un tema central, en el que combinarán plástica, escénica, música y cocina.
Además, está prevista la promoción de un curso de danza clásica, que será impartido por dos maestros de una compañía de ballet ruso, así como el concierto de la cantante de bossa nova Alma Rocío, que tendrá lugar en agosto.
