A sus 16 años, Jazmín Zárate, alumna de la Preparatoria Regional de San Martín Hidalgo, sabe qué quiere estudiar: psicología.
Es firme en su decisión a pesar de que sus familiares “quieren que curse medicina”. Otra, es que ella quiere prepararse en el Centro Universitario de los Altos (CUAltos), pero sus padres “no la dejan”. Y aunque todavía le quedan un par de años para convencerlos, Jazmín, con una sonrisa todavía infantil, asegura que “van a ceder”.
Los gritos de “¡uno de psicología!” para obtener un folleto con información de la carrera y los empujones para conocer las distintas ofertas académicas de casi 38 instituciones de educación superior, abundaban en los pasillos de la séptima Expo profesiones que se llevó a cabo los pasados 4 y 5 de octubre en las instalaciones del salón de usos múltiples del Tecnológico de la Universidad de Guadalajara.
Licenciaturas que iban desde urbanística y medio ambiente, pasando por profesionales medios en artes visuales con orientación en fotografía, hasta carreras en gastronomía y modelaje, eran parte del mar de oportunidades que los casi siete mil adolescentes que asistieron durante los dos días, donde las pudieron conocer para tomar una decisión, de la cual depende su futuro.
Ese era uno de los objetivos de este evento: “dar información de primera mano que les sirva”, aseguró la responsable de orientación vocacional de la Unidad de Bienestar Estudiantil de la coordinación de Servicios Estudiantiles de la Universidad de Guadalajara, Judith Nápoles Echauri.
Aunado a la información impresa que otorgaban los expositores, la Expo profesiones albergó una serie de conferencias sobre cada universidad y diversos módulos de orientación vocacional, clave para saber qué se quiere ser “cuando sea grande”.
Y es que, según Gilberto González Torres, quien es profesor de filosofía en la Preparatoria 12, cuando los adolescentes se encuentran cursando el quinto semestre y “se dan cuenta que ya no son tan adultos”, no tienen idea de lo que quieren ser. Entonces, asegura quien tiene contacto a diario con jóvenes, toman opciones bajo la influencia de los familiares: “Tienen que ser esto por tradición, por que el papá quiere, y otra parte es por que son inducidos por amigos; pocos son los que realmente toman sus decisiones y saben hacia dónde se dirigen”, añadió “no conocen sus habilidades o destrezas y no pueden decir de qué son capaces”.
Pero Jazmín no tiene problemas con ello. En la preparatoria a la que asiste, le han aplicado exámenes de orientación vocacional y cree en los resultados: “nos hicieron un test, como un examen donde veíamos cuáles aptitudes teníamos para estudiar y me di cuenta que las mías eran para las ciencias sociales y humanas”.
Parece estar segura de esas aptitudes, por eso escogió psicología: “me gusta ayudar mucho a la gente, convivir con las personas, siento que me relaciono mucho con eso”.
En cuanto a la oferta de la casa de estudios, Nápoles Echauri dijo que los centros que han tenido una mayor demanda de la información de carreras han sido en los Centros Universitarios de Ciencias de la Salud, de Ciencias Económico Administrativas, y el de Ciencias Sociales y Humanidades.
Puntualizó en que los centros universitarios regionales han “llamado la atención entre los asistentes por que es otra opción que tienen, sobre todo en las carreras que están sobre demanda en la zona metropolitana de Guadalajara”, como Jazmín, que espera irse al CUAltos, o como cientos de jóvenes que se reunieron ese día, que salían con puñados de folletos y que aprovechaban a cotorrear y a echar relajo antes de convertirse en adultos.
